Si quieres conocer las curiosidades del Panteón de Agripa en Roma has llegado al mejor sitio de internet para conocerlas, y así, descubrirlas antes de viajar a Roma y visitarlo.
El Panteón de Roma es para mí uno de los edificios de la antigüedad mejor conservados del mundo y el que mejor se conserva de toda la Antigua Roma.
Este monumento de la época imperial, maravilla de la arquitectura, ha servido de fuente de inspiración tanto para grandes artistas, como el mismísimo Miguel Ángel, quien lo tomó como referencia para la construcción de la cúpula de la Basílica de San Pedro.
Su edificación fue encargada al arquitecto Apolodoro de Damasco, el mejor arquitecto de la época, por el mismísimo emperador Adriano alrededor del año 118 en memoria del emperador César Augusto, y fue edificado sobre el antiguo Panteón construido por Marco Agripa.
Este templo que supuso una revolución constructiva, dotó de un enorme significado, simbolismo religioso y a la vez político a la Antigua Roma. Además, para mí, esta construcción es con la que se rompieron todas las normas del diseño arquitectónico y es mi edifico favorito de la Ciudad Eterna.
Por cierto, antes de continuar, y desgranarte sus curiosidades, te recomiendo adquirir esta entrada al Panteón para evitar las colas y visitarlo directamente, sin esperas, cuando viajes a Roma.
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Curiosidades del Panteón de Agripa
Son muchas las curiosidades del Panteón de Agripa, un edificio majestuoso, y por el cual siento un cariño especial, por eso aquí te hago un listado de ellas para que las disfrutes tanto como yo al conocerlas:
1. El panteón original no es el actual
Como ya había mencionado, el actual Panteón de Agripa fue edificado sobre las ruinas del antiguo Panteón construido en el año 27 a.C. por Agripa.
El motivo de ello, dos incendios que arrasaron con el edificio, salvándose tan solo el pórtico. Tras el primer incendio en el año 80, se hicieron unas primeras reconstrucciones durante el mandato de Domiciano.
Y ya en el año 110, durante el periodo de Trajano, ocurrió un segundo incendio que precisó de una reconstrucción total en tiempos de Adriano que daría como resultado el edificio actual.
2. En el pasado quedaba más alto: posee un frontón más pequeño de lo normal
Algo muy curioso, es que en la antigüedad se accedía por una escalera, ya que el edificio se encontraba a 1,32 m sobre el nivel de la plaza.
Por lo que más adelante se eliminaron las escaleras y se elevó el nivel del suelo que enfrenta al pórtico.
Un pórtico que fue diseñado en sus orígenes con columnas monolíticas de granito de 50 pies de altura romanos, unas 100 toneladas de peso y capiteles de 10 pies de alto de estilo corintio.
De esta manera, tendríamos un frontón visible en el cuerpo intermedio ocultándolo, aunque los constructores realizaron cambios al final, para poder usar columnas con fustes de 40 pies y unos capiteles de ocho pies.
Los expertos apuntan que se hizo así posiblemente porque se encontraron con problemas logísticos durante la construcción.
3. Nunca llevó el nombre del primer emperador de Roma: Augusto
Aunque es sabido que el emperador Marco Agripa fue quien mandó a construirlo para consagrar al primer emperador romano Augusto, éste nunca ha llevado su nombre.
Una muestra de ello lo podemos ver en el arquitrabe del edificio actual, con la inscripción original del primer edificio.
Se cree que el motivo, era la necesidad del emperador de huir de la aún reciente historia de la antigua República de Roma y del mandato del dictador Julio César.
4. La inscripción que vemos en su fachada miente
Como ya hemos comentado, el Panteón actual fue construido por orden de Adriano en el mismo lugar donde estaba el templo original de Agripa.
Sin embargo, la inscripción del Panteón cita “Marco Agripa, hijo de Lucio, lo hizo en su tercer consulado”, algo que no es cierto.
Además, después de que el arqueólogo Rodolfo Lanciani realizase excavaciones en el siglo XIX, llegó a la conclusión de que el Panteón de Roma original estuvo orientado al sur, opuesto al actual, que se orienta al norte.
Un edificio que poseía una planta con forma de T acortada y la entrada en la base, y del que sabemos gracias a algunos autores clásicos, que el antiguo templo no era un Panteón dedicado a todo los dioses como el de Adriano.
Agripa dedicó realmente este templo al culto de la dinastía Julio-Claudia, familia del emperador Augusto, por lo que probablemente estuvo dedicado a los protectores de esta familia: Marte, Venus y el divinizado Julio César.
De otro lado, se sabe que Adriano no imprimía su nombre en los edificios que mandaba construir, al contrario de lo que sí hacía Trajano, por lo que al final se mantuvo la inscripción original.
5. El lugar elegido para su construcción no fue elegido al azar
Marco Vipsanio Agripa, fue uno de los generales y políticos romanos más cercanos al primer emperador romano de la historia, tanto que se casó con su hija Julia la Mayor.
Por eso, el Panteón de Agripa fue construido fuera de las murallas de Roma en uno de los terrenos de su familia y en el que, según cuenta una leyenda, fue el lugar exacto donde desapareció Rómulo.
Un Rómulo considerado el fundador de Roma y convertido en Dios, divinizado, a partir de su desaparición.
6. La cúpula del Panteón: la más grande de la historia durante más de 1000 años
Una de las grandes curiosidades del Panteón de Agripa y la cual destaca sobre el resto es sin duda la enorme cúpula de 43,44 metros de diámetro, que fue la más grande durante más de mil años.
No fue hasta la construcción de la cúpula del Duomo de Florencia, cuando la cúpula del Panteón de Agripa dejó de ostentar esta posición.
Hasta entonces, fue mucho mayor que cualquier otra construida hasta la fecha, por lo que, en diferentes épocas, arquitectos de distintas partes del mundo, la han estudiado para inspirarse para la construcción de otras, como fue el caso de Brunellesqui para la creación de la cúpula del Duomo de Florencia o Miguel Ángel para diseñar la cúpula de San Pedro.
Sin embargo, con un diámetro de 150 pies romanos y 4535 toneladas de peso, la del Panteón es la mayor cúpula de hormigón en masa de la historia, osea, no posee armadura de acero en su interior.
7. Cuál era la función del Óculo u Oculus
En la cúspide de la cúpula está ubicado un orifico de mide 8’89 metros de diámetro llamado óculo u oculus.
Mira si a los romanos les gustaba la exactitud, que el óculo mide la quinta parte exacta del diámetro de la cúpula, por lo que demuestra que en la ingeniería romana no existen las cosas hechas al azar.
Su función principal es completamente práctica, ya que le resta peso a la inmensa cúpula del Panteón, lo que ha ayudado en cierto modo a que siga intacta hasta el día de hoy.
Una leyenda cuenta que el agua de la lluvia no pasa por este inmenso agujero, algo totalmente incierto, ya que existen unos pequeños orificios en el suelo del Panteón para filtrarla cuando llueve.
No obstante, su creación también iba más allá, ya que por éste se colaba la luz solar, al igual que hoy, pero entonces a cada hora iluminaba el rostro de una de las siete estatuas de divinidades romanas que albergaban los nichos del Panteón.
Estos nichos en la actualidad están vacíos, pero imagínate como sería para un romano ver a uno de sus dioses iluminados por la luz… ¡Sencillamente impresionante!
Además, el día de Pentecostés, a mediodía, desde el óculo se lanzan miles de pétalos de rosas rojas mientras un coro canta el himno Veni Creator Spiritus. Un espectáculo sencillamente maravilloso.
Asimismo, si estás en Roma el 21 de junio, durante el solsticio de verano, que es cuando el sol alcanza su cenit, a las 12 del mediodía verás como un haz de luz penetra perpendicularmente en el templo. Algo precioso.
8. Cómo ha sobrevivido el Panteón hasta la actualidad
Pues como ocurre con todo lo que se mantiene en pie en la Ciudad Eterna de la Roma de la antigüedad, el Panteón de Agripa no es una excepción.
Ya que la respuesta es más simple de lo que podría pensarse, porque ha pasado de ser un templo de culto pagano a uno cristiano, y la Iglesia Católica lo ha adaptado a sus creencias convirtiéndolo en la Iglesia de Santa María de los Mártires.
En el año 609, el papa Bonifacio IV recibió por parte del emperador bizantino Focas el templo como regalo, y desde entonces, lo convirtió en uno de culto cristiano.
Desde su consagración como la iglesia de Santa María de los Mártires, el Panteón de Agripa ostenta el título de ser el primer templo pagano convertido al cristianismo en Roma, por lo que desde su construcción ha tenido un uso ininterrumpido.
Gracias a esto el Panteón de Agripa no corrió la misma suerte que otros edificios romanos, y hoy en día, se sigue usando como iglesia.
9. Las puertas son más pequeñas que las originales
Las formidables puertas que dan a la cella son muy antiguas, algo que no cabe duda, pero no son las originales, que estaban chapadas en oro.
Las que vemos hoy en día son aun siendo enormes más pequeñas que el marco de la puerta y llevan en ese lugar desde el siglo XV.
10. El Panteón está circundado por una fosa
Existe un mito que narra que un antiguo brujo llamado Pietro Baialardo, muy popular en las leyendas medievales italianas, había hecho un pacto con el diablo: otra de las grandes curiosidades del Panteón de Agripa.
En este pacto Pietro recibió el gran Libro del comando, que estaba repleto de indicaciones de brujería y magia negra.
A la hora de su muerte, el brujo decidió refugiarse en el Panteón, lugar sagrado para los huesos de los mártires, por lo que al diablo le fue imposible entrar para llevarse su alma.
¿Y qué relación guarda con esto? Pues porque la leyenda cuenta que el diablo para descargar su ira empezó a dar vueltas y vueltas al templo, lo que terminó produciendo una zanja.
Y aunque esto es puramente una leyenda, lo cierto es que la fosa según los expertos fue creada para proteger al Panteón de Roma de las crecidas del río Tíber.
11. Un papa le puso orejas de burro y le quitó el bronce que le quedaba
El papa Urbano VIII, Maffeo Barberini, quedará retractado en la historia como el personaje que le puso ‘orejas de burro’ al Panteón de Roma a principios del siglo XVII: dos campanarios.
Estas dos torres, erróneamente atribuidas a Bernini, eran conocidas por los romanos como las orejas del asno, las cuales fueron retiradas a finales del siglo XIX, por suerte.
Sin embargo, este papa cometió incluso un sacrilegio mayor, ya que arrancó todo el bronce que quedaba del techo de la cúpula y el pórtico.
Digo que quedaba, ya que años atrás toda su cubierta, que estaba revestida de bronce, fue desmontada en parte por Constantino II en el siglo VII, quien se llevó el precioso metal a Constantinopla.
Algunas fuentes aseguran que Urbano VIII usó lo que dejó Constantino II para fabricar bombardas con las que proteger el Castillo Sant’Angelo, así como para construir Bernini el Baldaquino de San Pedro del Vaticano.
Hay una expresión en Roma que ha perdurado durante siglos que reza así: “Lo que no hicieron los bárbaros lo hicieron los Barberini”. En alusión al gran expolio que llevaron a cabo.
12. La Tumba de Rafael
La historia reza que el gran pintor del Renacimiento, Rafael Sanzio, nació 1483 y murió en 1520 un viernes santo, con tan solo 37 años, y hoy en día, los restos del joven artista descansan en el Panteón de Agripa.
Cuentan que su entierro fue uno de los asombrosos acontecimientos realizados en la ciudad de las efemérides y que fue velado en el Vaticano, junto a una de sus obras más importantes, la Transfiguración, la cual hoy podemos admirar en los Museos Vaticanos.
13. Sede de la Academia de los Virtuosos de Roma
Ya desde el Renacimiento, el templo se ha usado como sede de la Academia de los Virtuosos de Roma, llamada Insigne Academia Pontificia de Bellas Artes y Letras de los Virtuosos en el Panteón, por lo que como hemos visto anteriormente, sirve de sepulcro para grandes artistas italianos como Rafael o Vignola.
14. El más grande e ilustre personaje italiano del siglo XIX descansa aquí
Uno de los datos más curiosos y fascinantes del Panteón, es que en él descansan los restos mortales de Víctor Manuel II, primer rey de la Italia reunificada y conocido como el Padre de la Patria.
Algo fascinante, porque el lugar elegido para su tumba fue en el templo realizado en honor al primer emperador de Roma: Augusto. Algo que como podréis imaginar no fue determinado por casualidad.
Los restos de su hijo Humberto I y su esposa Margarita reposan también junto a él.
15. Lugar de descanso para los mártires cristianos
En su interior se conservan también una enorme cantidad de huesos de mártires cristianos, perseguidos por el Imperio Romano, procedentes de todas las Catacumbas de Roma.
Este es el porqué de haber sido bautizado como la iglesia de Santa María de los Mártires.
Información útil para visitar el Panteón de Roma y descubrir sus curiosidades en persona
🗺️ Dónde está el Panteón de Agripa: Plaza della Rotonda.
💶 Entrada y precio: La entrada cuesta 5 euros. Solamente es gratuito para los residentes de la ciudad.
⏱️ Horario: Abierto todos los días. Laborables de 8:30 a 19:15 / Domingos de 9:00 a 17:45 / Festivos de 9:00 – 12:45
Si te apetece, existe una ruta guiada gratuita por la Ciudad Eterna que recomiendo a mucha gente ya que te muestra los lugares más destacados de la ciudad con todo detalle como: la Fontana di Trevi, Plaza España, Piazza Navona e incluye el Panteón de Agripa. Solo tienes que dar la voluntad si lo deseas. De ti depende.
Bueno, y hasta aquí ha sido todo en este súper artículo sobre las curiosidades del Panteón de Agripa en Roma, por lo que espero que te sirva de mucha ayuda, para que cuando lo visites, puedas llegar a imaginarte cómo fue en sus mejores tiempos y comprender su historia.
No olvides dejarme un comentario, si te ha gustado o resultado interesante, y contándome qué piensas sobre el Panteón de Roma. Incluso puedes aportar rectificaciones o sugerirme ampliaciones para mejorarlo. Y recuerda algo muy importante: Un saludo y… ¡A ser felices!